El gobierno nacional incluyó al Centro de Salud Mental Hugo Rosarios, del barrio de Núñez, en la subasta de terrenos “en desuso, con mal uso o cuyo mantenimiento genera altos costos para el Estado”. Ignora, o no le importa, que allí se atiende a miles de personas cada semana. "¿En qué lugar del mundo se cierran hospitales?", pregunta la psicóloga Paula Barredo, coordinadora del Equipo de Niñez de la institución bajo amenaza. Nos explica que allí se atiende a niñxs, adolescentes y adultxs con diversas afecciones, no para el encierro sino para fomentar lazos sociales con otras personas y permitirles tener una vida independiente. Cuenta con 14 consutorios externos y se realizan talleres de inclusión con distintas actividades. Musicoterapia, textiles, muralismo, nutrición se cuentan entre ellas. Lxs trabajadorxs del Centro llevan a cabo contantes medidas de visibilización del conflicto, con el apoyo de vecinos, colegas de otras instituciones, referentes de la política y de la misma comuna, entre otros. Por el momento, no tienen respuestas concretas de los gobiernos nacional ni de la Ciudad Autónoma. En el Centro de Salud Mental N° 1 trabajan más de 110 personas, entre empleadxs, profesionales de planta, concurrentes, residentes y administrativos. La lucha continúa. En Instagram, se los encuantra en @enluchaelcentrouno.
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El gobierno nacional incluyó al Centro de Salud Mental Hugo Rosarios, del barrio de Núñez, en la subasta de terrenos “en desuso, con mal uso o cuyo mantenimiento genera altos costos para el Estado”. Ignora, o no le importa, que allí se atiende a miles de personas cada semana. "¿En qué lugar del mundo se cierran hospitales?", pregunta la psicóloga Paula Barredo, coordinadora del Equipo de Niñez de la institución bajo amenaza. Nos explica que allí se atiende a niñxs, adolescentes y adultxs con diversas afecciones, no para el encierro sino para fomentar lazos sociales con otras personas y permitirles tener una vida independiente. Cuenta con 14 consutorios externos y se realizan talleres de inclusión con distintas actividades. Musicoterapia, textiles, muralismo, nutrición se cuentan entre ellas. Lxs trabajadorxs del Centro llevan a cabo contantes medidas de visibilización del conflicto, con el apoyo de vecinos, colegas de otras instituciones, referentes de la política y de la misma comuna, entre otros. Por el momento, no tienen respuestas concretas de los gobiernos nacional ni de la Ciudad Autónoma. En el Centro de Salud Mental N° 1 trabajan más de 110 personas, entre empleadxs, profesionales de planta, concurrentes, residentes y administrativos. La lucha continúa. En Instagram, se los encuantra en @enluchaelcentrouno.
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