March 22, 2025 06:01
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Cuando los HEREDEROS DEL CUYUM recibían los novísimos materiales no podían hacer otra cosa que alegrarse por la confianza de los músicos en ellos depositada y la deferencia de anticiparles sus creaciones. Por eso estaban complacidos con el envío de Mario Loyola de un gato que en abril de 2025 recién subiría a las plataformas y que los hizo honrar a la Cuyanísima Trinidad, pero a partir de la tercera persona. Luego, invocada, la cueca de y por José Luis Aguirre en yunta con Charly Guzmán, para desembocar en la pimera persona con la tonada de Hernán Lucero y Fernando Barrientos por el propio Hernán Lucero a dos picos con Luciana Jury. Ya lanzados, se entregaron al disfrute prodigado por Griselda Dominelli y Juan Martín Scalerandi, Orozco Barrientos, Mario Díaz y Susana Castro, la sanjuanina que a partir de un gato cuyano tentó a los HEREDEROS DEL CUYUM a seguir escuchándola en tiempos de tonada, canción cordillerana y vals. A medida que la madrugada le cedía el trono a la mañana, los rayos de sol se posaban sobre estanterías y anaqueles que alertaban a los HEREDEROS DEL CUYUM sobre brillos que era preciso no dejar apagar, como Los Trovadores de Cuyo, una cueca de Palorma y un gato "cronicado" por Sergio Zabala, antesala de una zamba riojana introducida por su creador, el enorme Ramón Navarro, cantada por Oscar Domínguez, y una polca cuyana en la voz de José Ceña. Cumplida la primera parte, llegaron los Avisos Parroquiales con los registros de Los Videla, Silvia Zavala y del Dúo Sur Adentro. Y le siguieron, casi para saciar la una provocada gula, Arsenio Aguirre, Tito Francia, Perla Argentina Aguirre, Juan Sebastián Garay, Algarroba.Com, y Nahuel Jofré con Polo Martí. Para tomar con velocidad el codo y encarar la recta final de la mano de Melisa Budini y Sebastián Narváez -Verdeagua-, Hernán "Chueco" González y Valeria Wilde. Para cerrar, poema y gato cuyano, de la mano de Gabriela Huamán. Cuando se dieron cuenta las horas se habían cumplido y el reloj de arena había empezado a descontar. Satisfechos por la panzada, los HEREDEROS DEL CUYUM ya empezaron a pensar en el próximo encuentro... Read more
Cuando los HEREDEROS DEL CUYUM recibían los novísimos materiales no podían hacer otra cosa que alegrarse por la confianza de los músicos en ellos depositada y la deferencia de anticiparles sus creaciones. Por eso estaban complacidos con el envío de Mario Loyola de un gato que en abril de 2025 recién subiría a las plataformas y que los hizo honrar a la Cuyanísima Trinidad, pero a partir de la tercera persona. Luego, invocada, la cueca de y por José Luis Aguirre en yunta con Charly Guzmán, para desembocar en la pimera persona con la tonada de Hernán Lucero y Fernando Barrientos por el propio Hernán Lucero a dos picos con Luciana Jury. Ya lanzados, se entregaron al disfrute prodigado por Griselda Dominelli y Juan Martín Scalerandi, Orozco Barrientos, Mario Díaz y Susana Castro, la sanjuanina que a partir de un gato cuyano tentó a los HEREDEROS DEL CUYUM a seguir escuchándola en tiempos de tonada, canción cordillerana y vals. A medida que la madrugada le cedía el trono a la mañana, los rayos de sol se posaban sobre estanterías y anaqueles que alertaban a los HEREDEROS DEL CUYUM sobre brillos que era preciso no dejar apagar, como Los Trovadores de Cuyo, una cueca de Palorma y un gato "cronicado" por Sergio Zabala, antesala de una zamba riojana introducida por su creador, el enorme Ramón Navarro, cantada por Oscar Domínguez, y una polca cuyana en la voz de José Ceña. Cumplida la primera parte, llegaron los Avisos Parroquiales con los registros de Los Videla, Silvia Zavala y del Dúo Sur Adentro. Y le siguieron, casi para saciar la una provocada gula, Arsenio Aguirre, Tito Francia, Perla Argentina Aguirre, Juan Sebastián Garay, Algarroba.Com, y Nahuel Jofré con Polo Martí. Para tomar con velocidad el codo y encarar la recta final de la mano de Melisa Budini y Sebastián Narváez -Verdeagua-, Hernán "Chueco" González y Valeria Wilde. Para cerrar, poema y gato cuyano, de la mano de Gabriela Huamán. Cuando se dieron cuenta las horas se habían cumplido y el reloj de arena había empezado a descontar. Satisfechos por la panzada, los HEREDEROS DEL CUYUM ya empezaron a pensar en el próximo encuentro...